
El Departamento de Policรญa de Hialeah arrestรณ a dos hombres acusados de llevar a cabo un aterrador secuestro y ataque que resultรณ en mรบltiples lesiones fรญsicas y un intenso estrรฉs emocional en la vรญctima.
Segรบn dijeron las autoridades de la policรญa el hecho tuvo lugar en plena jornada del sรกbado pasado y estรก investigรกndose como un ataque intencionado y brutal con conexiones familiares lo que proporciona una dimensiรณn perturbadora al asunto.
La policรญa identificรณ a los sospechosos como Yohandry Rivera de 40 aรฑos de edad y Sacha Moreno de 26, ambos enfrentan cargos de secuestro, agresiรณn temeraria, robo con armas letales, asรญ como ataque con el objetivo de realizar un crimen grave. El asalto se dio aproximadamente a las 3:30 de la tarde en un negocio situado cerca de la cuadra 800 de la calle West 20.
De acuerdo con lo que declarรณ la vรญctima, los acontecimientos se originaron a raรญz de una pelea que se produjo esa maรฑana con su excompaรฑero, con quien todavรญa vivรญa. La tensiรณn acumulada hizo que la mujer decidiera llamar a las autoridades, lo que al parecer provocรณ los sucesos subsiguientes.
Poco despuรฉs del incidente en casa, el padre de la mujer, Rivera, se comunicรณ con el hombre, presentรกndole lo que parecรญa ser una oportunidad de trabajo en su empresa.
Se presentรณ en el sitio, sin sospechar que caรญa en una trampa meticulosamente organizada. Al entrar, fue saludado por Rivera, mientras que Moreno -quien era cuรฑado de Rivera- se acercรณ sigilosamente desde atrรกs y lo sorprendiรณ con un ataque.
De acuerdo con el informe, Rivera asestรณ un fuerte golpe en la cara del hombre y, posteriormente, usรณ una pistola oscura para atacarlo, provocรกndole un gran moretรณn. Al intentar incorporarse, Moreno lo sujetรณ por detrรกs con un agarre de estrangulaciรณn, mientras que Rivera se ocupaba de sujetarle los pies con una cuerda.
La tensiรณn aumentรณ notablemente cuando, incapacitado, la vรญctima fue forzada por Moreno hacia el interior de un coche situado en el establecimiento, mientras seguรญa bajo la presiรณn de un estrangulamiento.
En un instante de pรกnico, cuando Rivera dejรณ caer temporalmente la pistola para ajustar la cuerda, la vรญctima aprovechรณ la oportunidad para intentar apoderarse del arma, iniciรกndose asรญ una lucha. No obstante, Moreno lo golpeรณ nuevamente en la parte posterior de la cabeza, forzรกndolo a soltar el arma. Rivera la tomรณ de nuevo enseguida, le apuntรณ y le revisรณ los bolsillos, robรกndole su billetera.
La pesadilla llegรณ a su fin cuando el hombre, pidiendo desesperadamente que lo dejaran vivir, logrรณ salir del lugar. Poco despuรฉs consiguiรณ informar a las fuerzas del orden, que encontraron diversas lesiones evidentes: contusiones en la cabeza, marcas alrededor de los tobillos y otros indicios fรญsicos que respaldaban su historia.
Despuรฉs de ser encontrados, Rivera y Moreno se rindieron a las autoridades policiales de manera voluntaria, aunque ambos optaron por no hacer declaraciones, de acuerdo con el informe oficial. La investigaciรณn sigue su curso mientras los fiscales analizan las acciones legales a seguir. Actualmente se encuentran en custodia en el Centro Correccional Turner Guilford Knight, sin posibilidad de libertad bajo fianza.
Este incidente ha suscitado inquietud en la comunidad de Hialeah, donde los problemas de violencia domรฉstica y los enfrentamientos personales que alcanzan niveles delictivos son un desafรญo permanente para las fuerzas del orden.
Los detalles del incidente, que incluyen un engaรฑo disfrazado de una falsa propuesta laboral y un ataque perpetrado con una violencia inusitada, lo han posicionado como uno de los eventos mรกs inquietantes que ha enfrentado la Policรญa local en tiempos recientes.