
Una ciudadana cubana identificada como Geisy Valdés Caballero, de 48 años, se encuentra detenida en Miami tras ser acusada de múltiples estafas relacionadas con obras de remodelación que jamás fueron ejecutadas. Entre las víctimas figura el conocido empresario cubano Manuel Francos, propietario del emblemático club nocturno “Azúcar”, quien denunció haber sido engañado por Valdés en un proyecto de renovación de su negocio.
Promesas vacías y obras inexistentes
Según relató Francos, en 2023 contrató a Geisy Valdés para cumplir con ciertos requerimientos del gobierno local, que exigían remodelaciones específicas en su local: un nuevo techo exterior y un camerino con baño para los artistas. Para asegurar el cumplimiento de las obras, ambas partes firmaron contratos y Francos entregó varios cheques como adelanto por los servicios. Sin embargo, los trabajos nunca comenzaron.
A lo largo de varios meses, Valdés fue ofreciendo excusas reiteradas sobre supuestos retrasos en la llegada de materiales, problemas logísticos y dificultades con los permisos. Mientras tanto, el empresario no observaba avance alguno en las obras contratadas.
Registro en video y evidencia sólida
Francos no sólo conservó todos los documentos legales y financieros —como contratos, cheques y transacciones bancarias— sino que también grabó videos durante las visitas de Valdés al establecimiento, en los que quedaban evidenciadas sus promesas de cumplimiento y sus excusas por los retrasos. Tras varios intentos fallidos por obtener respuestas o reembolsos, el empresario optó por presentar una denuncia formal ante las autoridades.
Además, al notar la inacción de Valdés, contrató una nueva empresa que sí llevó adelante y finalizó las remodelaciones, asumiendo un gasto adicional significativo. “Geisy Valdés… oye, ese apellido me resonó. Y ahí fue cuando vi el impacto en las cámaras, en el televisor. Después de 40 años en este negocio, me dijeron que tenía que hacer esos cambios”, lamentó el empresario.
Antecedentes delictivos
No se trata del primer caso en el que Geisy Valdés es señalada por fraude. En 2023, ya había sido acusada por una estafa de $26,000 en otra obra residencial. En aquella ocasión, también cobró por adelantado, pero nunca inició la construcción. A pesar de sus alegatos de que ofreció devolver el dinero a la víctima, la mujer enfrentó una denuncia legal.
Arresto y proceso judicial
La acumulación de denuncias terminó llevando a Valdés tras las rejas. Las autoridades locales están procesando múltiples casos vinculados al mismo patrón de conducta fraudulenta. Aunque aún se desconoce el fallo definitivo, se espera que enfrente cargos serios por fraude, apropiación indebida de fondos y posible reincidencia.
Una advertencia a la comunidad
El caso ha servido como una advertencia para otros propietarios de negocios y residentes en el sur de Florida. Francos, como víctima directa, hizo un llamado público para que las personas verifiquen antecedentes penales, confirmen la validez de las licencias profesionales y exijan garantías antes de entregar sumas de dinero por adelantado para cualquier tipo de obra o remodelación.
“Este tipo de personas juegan con la confianza de los demás y perjudican a quienes sí trabajan honestamente. Hay que actuar rápido cuando no se cumple lo acordado”, expresó Francos en una entrevista.
El caso de Geisy Valdés no solo revela una cadena de estafas en Miami, sino también un fenómeno que afecta a muchas personas que confían ciegamente en contratistas sin verificar su historial. Su detención podría marcar un precedente en la lucha contra el fraude en el sector de la construcción informal del sur de la Florida.