Cubana ganadora de la Lotería de Visas 2025 lamenta denegación de su solicitud por presunta afiliación política al régimen cubano: “Nunca me presentaron prueba alguna”

Una nueva controversia emerge en torno a los procesos migratorios, luego de que una persona denunciara públicamente haber sido víctima de una injusticia en la solicitud de su visa a Estados Unidos mediante el la Lotería de Visas 2025 conocida popularmente como El Bombo.

El periodista cubano Mario J. Pentón en su cuenta de Instagram colgó el testimonio de una cubana que atraviesa por una desilusión tras la denegación de su visa en la embajada de EE.UU en Cuba bajo el argumento de una “posible afiliación al Partido Comunista”, una imputación que jamás le fue comunicada oficialmente ni pudo ser respaldada con pruebas.


Un rechazo inesperado y sin fundamento

La afectada expresa su desconcierto ante lo ocurrido, señalando que no existe vinculación alguna con la supuesta agrupación política. Subraya que en ningún momento le notificaron ni presentaron evidencia al respecto. “Nunca me presentaron prueba alguna”, destacando no sólo la falta de claridad en el proceso, sino también la arbitrariedad del trasfondo político que parece haber motivado la decisión.

La mujer reconoce que formó parte de las brigadas médicas cubanas que tienen que ir a otros países a trabajar para poder sustentar después a sus familias. «Trabajé 25 años en el sistema de salud, en una farmacia, y sí, cumplí una misión internacionalista, como muchos lo hicimos: no por ideología, sino por necesidad, para intentar escapar de las carencias que todos conocemos», dijo en su texto.

Por otra parte, destacó que gastó más de mil dólares en chequeos médicos, viajes y otros trámites indispensables para poder obtener su visa, dinero que ya no puede recuperar. «El gobierno de Estados Unidos que tanto admiramos fue quien rompió nuestros sueños con una equis en un papel», lamentó la cubana.

Falta de transparencia en el sistema migratorio

Este caso revela un vacío preocupante en la transparencia del sistema de visas. La persona afectada, que se encontraba viviendo en el extranjero desde hacía un tiempo, asegura que el rechazo no solo es infundado, sino también lesivo en términos personales y profesionales.


Mientras tanto, las autoridades migratorias no han brindado explicación oficial y el caso ya genera cuestionamientos sobre:

  • ¿Qué mecanismos de verificación se utilizan para determinar estas afiliaciones políticas?
  • ¿Existe derecho real a defensa o apelación frente a esas acusaciones?
  • ¿Se respetan los principios de presunción de inocencia y debido proceso?

Repercusiones y posibles reclamos

Enfrentada a esta situación, la denunciadora podría recurrir tanto a tribunales administrativos como a organismos defensores de derechos humanos, argumentando arbitrariedad. Además, el caso resalta la necesidad de una revisión de los protocolos migratorios, asegurando que ninguna persona vea vulnerados sus derechos por acusaciones políticas sin evidencias.

Una voz que exige respuestas

Este testimonio se suma a una creciente preocupación en la comunidad cubana respecto a cómo la embajada maneja las solicitudes de ingreso, y plantea una pregunta clave: ¿Cómo proteger el derecho a migrar sin que decisiones discrecionales limiten libertades individuales?

Para la ciudadana afectada, el rechazo de su visa representa algo más que un obstáculo burocrático; es una afrenta personal y una llamada de atención al gobierno de EE.UU a vigilar los procesos migratorios con ojos críticos.

«Después de tantos años de espera, la esperanza se nos fue en pedazos al salir de la embajada. Quisiera que alguien con poder en ese gobierno pusiera sus ojos en casos como el mío, en esas decisiones que afectan directamente a familias cubanas que solo quieren trabajar, salir adelante y dar un futuro mejor a sus hijos», concluyó la mujer

El número de casos de cubanos con visas denegadas bajo el argumento de supuestas “afiliaciones políticas”, cada vez se acrecienta más. Lo que comenzó como relatos aislados en redes sociales está convirtiéndose en un fenómeno que moviliza a ciudadanos, abogados y organizaciones defensoras de derechos humanos. Las redes sociales se han convertido en el principal altavoz. Instagram, Facebook y Twitter concentran relatos acompañados de documentos y cartas consulares, con el objetivo de visibilizar las irregularidades y generar presión mediática.

El pasado 14 de junio n grupo de cubanos seleccionados en la Lotería de Visas de Diversidad 2025 decidió alzar la voz y enviar una carta al secretario de Estado Marco Rubio para pedir su intervención ante las crecientes restricciones migratorias que, aseguran, están destruyendo sus posibilidades de emigrar legalmente a Estados Unidos.

La carta denuncia que la Embajada de EE. UU. en La Habana está rechazando de manera casi automática las solicitudes de visado de los ganadores cubanos, amparándose en el llamado Travel Ban, una prohibición que, según los denunciantes, se aplica sin evaluar cada caso individualmente ni presentar pruebas concretas.

Entre los principales reclamos de los afectados está la forma en que la embajada está interpretando las disposiciones migratorias. Muchos cubanos han trabajado en instituciones estatales —como hospitales, escuelas, empresas de telecomunicaciones o bancos—, pero aseguran que eso no significa afiliación política.

La preocupación crece porque los procesos de la Lotería de Visas tienen una fecha límite. Los cubanos tienen hasta el 30 de septiembre de 2025 para concretar sus visados o perderán definitivamente su oportunidad. Además, Cuba ha quedado excluida del sorteo de 2026, lo que significa que para muchos esta es su última posibilidad de emigrar legalmente mediante el bombo.

Para estos cubanos, el sueño americano se ha convertido en una carrera contrarreloj. Temen quedar marcados por etiquetas políticas que podrían cerrarles no solo las puertas de Estados Unidos, sino de otros países en el futuro.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *