Cubanos reaccionan a la implementación del Travel Ban en EE.UU.

La nueva proclamación migratoria del gobierno de Estados Unidos que impone restricciones de entrada a ciudadanos de varios países, entre ellos Cuba, ha desatado una ola de reacciones intensas en redes sociales, especialmente entre cubanos residentes en EE.UU. o con familiares en la isla.

Las medidas, que limitan el otorgamiento de visas de turismo (B1/B2), estudio (F, M, J) y procesos de reunificación familiar, han reavivado una división profunda entre quienes aplauden la decisión como necesaria y quienes la consideran un golpe devastador a las familias que han seguido vías legales para emigrar.


Apoyo a la medida: «Era hora de poner orden»

Entre los comentarios favorables al Travel Ban, muchos usuarios destacan el abuso del sistema migratorio por parte de quienes aseguran huir de una dictadura, pero luego regresan frecuentemente a la isla.

Cada quién recoge lo que siembra… llegan diciendo que escapan de una dictadura y al año están en Cuba alimentando mipimes y fortaleciendo la represión”, comentó un internauta.

Otros ven la medida como un filtro necesario:

Que restrinjan está bien, para que no entren más comunistas. Solo debe pasar el que realmente lo necesite y se someta a un filtro.”

Algunos incluso celebran el regreso a políticas más estrictas:


Que está perfecto. Deberían haberlo implantado hace mucho tiempo atrás”, escribió otro usuario.

Dolor y desamparo: “Nos han destrozado”

Del otro lado, cientos de comentarios reflejan el sufrimiento de familias separadas, muchas de ellas tras años esperando trámites legales de reunificación. El impacto emocional de la proclamación es evidente:

Una injusticia muy grande. Tenía la esperanza de poder reunirme con mis dos hijitos. Mi corazón está destrozado.”

Otra madre denunció:

Mi niña tiene un solo riñón… Nuestra esperanza era vivir juntos en EE.UU. para darle atención médica. Esto ha sido devastador. Solo pido misericordia.”

También se alzan críticas hacia quienes, ya establecidos en EE.UU., celebran la medida sin empatía:

Es absurdo ver tanta gente alegrándose del dolor ajeno, solo porque ya están allá gozando de todos los privilegios. ¿Acaso la familia no es sagrada?

Una comunidad dividida

La discusión también ha revelado tensiones internas entre cubanos exiliados. Algunos acusan a sus compatriotas de volverse “más americanos que los propios americanos”, olvidando el dolor que implica dejar atrás una familia. Otros, en cambio, sostienen que el sistema ha sido manipulado y debía corregirse.

Se creen impunes y si quieren los sacan a patadas… hablan de comunistas, pero ahí en Cuba están sus madres, hermanos…”, expresó un comentario visiblemente molesto con la polarización del discurso.

El Travel Ban ha encendido un debate que va más allá de la política migratoria. Para muchos cubanos, es un recordatorio doloroso de lo frágil que puede ser el sueño de la reunificación familiar. Mientras unos piden control y orden, otros claman por compasión y justicia para quienes han seguido las reglas. La brecha en la comunidad parece tan profunda como la que separa a muchas familias de un reencuentro largamente esperado.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *