Funcionarios en Estados Unidos han dado a conocer información adicional acerca del individuo presuntamente implicado en el ataque armado que se produjo este jueves en el recinto de la Universidad Estatal de Florida (FSU) en Tallahassee, el cual resultó en la muerte de al menos dos personas y múltiples heridos.
Se dio a conocer que el posible autor de los disparos es Phoenix Ikner, un estudiante de 20 años de la misma universidad e hijo de un asistente del sheriff del condado de León, según lo declarado por el sheriff Walt McNeil en una conferencia de prensa.
Ikner no era un extraño para las autoridades. Según McNeil, el joven había sido miembro del Consejo Asesor Juvenil del Departamento del Sheriff y había estado involucrado en diversos programas de formación que la agencia organizaba.
El oficial comentó que el atacante se le conocía dentro del cuerpo de oficiales por su participación juvenil. “El hecho de que haya tenido acceso a un arma no nos sorprende”, agregó el policía.
En la actualidad, este alumno se encuentra ingresado en el hospital debido a una lesión; sin embargo, las autoridades no han proporcionado detalles sobre la gravedad de su condición ni aclararon si resultó lesionado durante su arresto o en el enfrentamiento con la policía.
Los estudios iniciales sugieren que Ikner empleó un arma de fuego que pertenecería a su madre, quien tiene 18 años de experiencia como veterana en el Departamento del Alguacil del condado de León. El arma era antigua y la exagente la compró de manera legal por la oficial.
“Desgraciadamente, su hijo tuvo acceso a una de sus armas y esa fue una de las que se encontraron en la escena”, subrayó el sheriff. Las fuerzas del orden continúan investigando si Ikner poseía otras armas y de qué manera consiguió el arma que se utilizó en el ataque.
El incidente sucedió aproximadamente a las 11:50 a.m. del jueves, en las proximidades del centro estudiantil de la FSU. La institución activó su protocolo de emergencia, instando a alumnos y empleados a resguardarse en sus ubicaciones debido a la amenaza de un tirador.
Un robusto despliegue de fuerzas de seguridad fue llevado a cabo por el FBI junto con las autoridades locales. Aproximadamente a las 3:00 p.m., el sistema de avisos informó que el peligro había sido “controlado”, lo que permitió a los estudiantes volver a sus hogares.
No obstante, las autoridades sugieren mantenerse alejado del área del centro académico, que sigue siendo vista como un lugar peligroso mientras las indagaciones están en curso. Hasta ahora, no se han dado a conocer los nombres de los fallecidos ni se ha esclarecido la razón detrás del ataque. Las fuerzas del orden han confirmado que la indagatoria permanece activa y que se proporcionarán más información conforme el caso progrese.
Después del incidente, el rector de FSU, Richard McCullough, se comunicó con la comunidad educativa para repudiar el acto violento trágico y sin sentido que tuvo lugar en el campus.
Nos sentimos profundamente tristes. Compartimos el dolor con las familias, amigos y seres queridos de aquellos que han fallecido, comentó McCullough. Extendemos nuestro cariño a los heridos y brindamos apoyo a quienes atraviesan este sufrimiento.
Otras universidades también han manifestado su respaldo. Kent Fuchs, quien ocupa el cargo de presidente interino en la Universidad de Florida, compartió un mensaje a través de la plataforma X dirigido a la comunidad de FSU.
“Nuestros más afectuosos pensamientos y nuestro más sentido pésame a la familia de la Universidad Estatal de Florida. Nuestros corazones están con todos los que se han visto afectados por los tiroteos y con sus seres queridos”, dijo el directivo d la universidad.
