
Lo que debía ser una noche de pesca entre amigos terminó convertido en una escena de tensión y sorpresa en Boca Grande, Florida, cuando un pescador resultó herido tras el ataque de un tiburón. El incidente, captado en video, ha encendido nuevamente la alarma sobre la interacción de los humanos con la vida marina en la costa del Golfo.
El momento captado en cámara
El protagonista de esta historia es Shawn Meuse, quien disfrutaba de una jornada de pesca nocturna. Junto a sus compañeros, logró capturar un tiburón limón de casi dos metros, una especie común en las aguas del sur de Florida. Tras sacarlo del agua y retirarle el anzuelo, el grupo decidió tomarse una foto antes de devolverlo al mar. Fue en ese preciso instante cuando el animal, en un movimiento brusco e inesperado, giró y mordió la pierna de Meuse.
La reacción inmediata quedó grabada en un video que se viralizó rápidamente. El meteorólogo Matt Devitt compartió las imágenes en sus redes, advirtiendo que podían resultar impactantes. “Tiburón muerde a un hombre de Florida en la pierna después de que lo enrolló pescando en Boca Grande durante el fin de semana. La lesión fue lo suficientemente grave como para que lo llevaran al hospital”, escribió en su perfil de Facebook.
El clip muestra la rapidez con que el tiburón atacó y el desconcierto de los presentes, que intentaron socorrer al herido en cuestión de segundos.
Traslado urgente y testimonio del herido
La mordida fue lo suficientemente grave como para que Meuse necesitara que los Bomberos de Boca grande lo trasladaran por vía aérea al Gulf Coast Medical Center, en Fort Myers. Desde allí, el pescador relató lo ocurrido: “Acabábamos de sacar el anzuelo de su boca. Íbamos a liberarlo, pero el tiburón se giró y me mordió”, contó con notable calma, pese a lo ocurrido.
El propio afectado se ha mostrado optimista y agradecido de estar vivo, un detalle que ha sorprendido a medios locales, dado el riesgo que conllevó el ataque. “Volvería hoy si pudiera salir del hospital. Es una lástima, pero es algo que pasa cuando uno se va, a veces pasa. Por suerte, solo me quitó un poquito, no mucho. Así que, ¿sabes?, soy uno de las afortunados. Y, ¿sabes?, soy víctima de una mordedura de tiburón. Muchas buenas historias ahora”, comentó sonriendo a la cámara desde el hospital.
Una zona con incidentes recientes
Este no es un hecho aislado. El ataque se produjo apenas dos meses después de otro incidente similar en la misma área de Boca Grande, un destino muy frecuentado por pescadores deportivos y turistas. La repetición de estos casos ha generado preocupación entre residentes y visitantes, que se preguntan si las interacciones con tiburones están aumentando en la zona.
Según el International Shark Attack File (ISAF), Florida es históricamente el estado con mayor número de mordidas de tiburón en Estados Unidos, aunque la mayoría de los casos no son mortales. Las aguas cálidas, ricas en especies de peces, atraen tanto a los tiburones como a pescadores y bañistas, lo que eleva las posibilidades de encuentros peligrosos.
El tiburón limón: una especie común pero impredecible
El tiburón limón (Negaprion brevirostris) habita principalmente en aguas tropicales y subtropicales. Aunque no se considera entre las especies más agresivas, su tamaño —puede superar los 3 metros— y la potencia de su mordida pueden causar lesiones de consideración. Los expertos señalan que cuando se encuentra bajo estrés, como en este caso al ser capturado, puede reaccionar de forma defensiva.
Recomendaciones de seguridad
Especialistas en vida marina recomiendan seguir medidas básicas de prevención:
- Evitar manipular tiburones directamente, incluso después de retirarlos del agua.
- Usar herramientas largas para retirar anzuelos en lugar de acercar las manos.
- Liberar al animal lo más rápido posible para reducir su nivel de estrés.
- Mantenerse en grupo y nunca pescar tiburones sin experiencia previa.
“Nunca he visto a nadie, precisamente pescando un tiburón, ser mordido. Hay que tener cuidado cuando se juega con la Madre Naturaleza”, dijo el jefe de bomberos C.W. Blosser quien recordó que los tiburones se hacen sentir más en las costas durante la temporada de sábalos.
El ataque sufrido por Meuse no es un hecho aislado en la zona. Apenas dos meses atrás, una niña de nueve años fue mordida por un tiburón mientras disfrutaba de un baño en esas mismas aguas. De acuerdo con el Fort Myers News-Press, el suceso ocurrido este fin de semana se convierte en el tercer ataque documentado desde que Blosser asumió el cargo de jefe hace ya 16 años.
Reflexión final
El caso de Shawn Meuse es un recordatorio de que la línea que separa la aventura recreativa del riesgo real en el mar puede ser muy delgada. Aunque la pesca deportiva es una tradición en Florida y atrae a miles de turistas cada año, la naturaleza salvaje de especies como el tiburón limón recuerda la necesidad de actuar con responsabilidad y respeto.