La Policía de Miami Beach anunció el arresto de una pareja acusada de ejecutar una serie de violentos robos de relojes de lujo en las calles de la ciudad, dirigidos principalmente contra clientes que salían de exclusivos clubes nocturnos. El caso refleja una tendencia creciente en el sur de Florida, donde las autoridades han registrado un aumento en los asaltos relacionados con piezas de alta relojería, un mercado cada vez más atractivo para bandas organizadas.
El operativo y el modus operandi
Las autoridades identificaron a los detenidos como Dwight Gustave, de 30 años, y Adria Banks, de 41. Según el informe policial, ambos operaban en conjunto: Banks fungía como conductora de huida mientras Gustave, encapuchado o enmascarado, abordaba a las víctimas en las inmediaciones de residencias y alojamientos temporales, como Airbnbs, o en las cercanías de discotecas de renombre como Space en el Downtown de Miami.
Bajo amenaza de arma de fuego, obligaban a las víctimas a entregar sus pertenencias, enfocándose en relojes de alta gama como Rolex o Audemars Piguet, piezas que pueden revenderse rápidamente en el mercado negro o en transacciones clandestinas.
Bienes robados y recuperados
En el domicilio de Gustave, los agentes encontraron un Rolex de aproximadamente 20.000 dólares, un Audemars Piguet valorado en 140.000 dólares, y más de 16.000 dólares en efectivo, además de otras evidencias que lo vinculan a los asaltos. En total, las autoridades estiman que el valor de los bienes recuperados supera los 176.000 dólares.
Este hallazgo refuerza las sospechas de que la pareja pudo haber participado en otros incidentes similares aún bajo investigación.
Antecedentes penales de los acusados
La trayectoria delictiva de ambos detenidos es amplia. Gustave cumplió una condena previa de cinco años en prisión por cargos de robo. Banks, por su parte, estaba en libertad condicional tras ser culpable de participar en un millonario robo de joyería, con pérdidas estimadas en más de 500.000 dólares.
Los reincidentes ahora enfrentan nuevas acusaciones: Gustave permanece en el Turner Guilford Knight Correctional Center bajo múltiples cargos por robo a mano armada, sin derecho a fianza fijada hasta el momento. Banks fue arrestada en el condado de Broward y deberá responder por allanamiento, robo mayor y violación de probation.
Una tendencia en crecimiento
El caso no es aislado. En los últimos años, Miami y Miami Beach han experimentado un repunte en delitos relacionados con relojes de lujo, convirtiéndose en un fenómeno de alto impacto debido al perfil de las víctimas y al valor de las pérdidas.
Según datos policiales, entre 2022 y 2024 se reportaron decenas de incidentes similares en el sur de Florida, muchos vinculados a redes criminales que operan en ciudades con fuerte turismo internacional. Estos relojes, algunos con valores que superan los 100.000 dólares, no solo son codiciados como objetos de prestigio, sino también como activos fáciles de transportar y de vender en mercados paralelos.
La ciudad de Miami atraviesa una preocupante oleada de robos de relojes de lujo, un fenómeno que afecta tanto a turistas como a residentes y que ha llevado a la policía a reforzar la seguridad en zonas turísticas.
Uno de los casos más notorios es el de Esther María Torres, de 20 años, sentenciada en julio de 2025 a cinco años de libertad condicional tras declararse culpable de varios cargos, entre ellos asalto con arma y robo con fuerza. En marzo, Torres utilizó gas pimienta para incapacitar a sus víctimas en hoteles de Miami Beach. En el Breakwater Hotel, sustrajo un reloj Hugo Boss y pertenencias personales; días después, en el Fontainebleau Hotel, robó un Rolex Submariner valorado en $22 000.
Advertencia a la comunidad
Las autoridades locales advierten que estos crímenes no son incidentes aislados, sino parte de una tendencia creciente en la que los relojes de alta gama se han convertido en blancos preferidos de delincuentes. La violencia de los ataques, que incluyen desde el uso de gas pimienta hasta armas de fuego, ha generado preocupación entre hoteleros, dueños de clubes y turistas que visitan el sur de Florida.
La Policía de Miami Beach exhortó a los residentes y turistas a extremar precauciones, especialmente al salir de zonas de entretenimiento nocturno. “Los delincuentes buscan piezas visibles y de gran valor. Un reloj de lujo puede equivaler a un atraco de decenas de miles de dólares en segundos”, señaló un investigador del Departamento de Policía de Miami Beach.
Además, las autoridades instan a posibles víctimas que no hayan denunciado hechos similares a presentarse, pues sospechan que Gustave y Banks podrían estar involucrados en más asaltos de los que figuran en el expediente actual.
Este caso no solo expone el peligro latente para quienes ostentan bienes de alto valor en áreas concurridas de Miami, sino que también refleja cómo el mercado negro de relojes de lujo se ha convertido en un motor para la delincuencia organizada en el sur de Florida.
