
En un gesto cargado de simbolismo político y en medio de las celebraciones del Día de la Independencia, el presidente Donald Trump planea firmar este jueves en la Casa Blanca su ambicioso proyecto de ley de recortes fiscales y reducción del gasto federal, conocido popularmente como el “One Big Beautiful Bill.”
La firma se realizará durante el tradicional picnic del 4 de julio en los jardines presidenciales, mientras aviones de combate y bombarderos sobrevuelen el lugar, en un espectáculo que promete subrayar el tono patriótico y triunfalista que busca imprimir la administración republicana.
Amplio respaldo republicano
La aprobación de la ley en el Congreso fue una victoria clave para Trump, que logró la casi total unidad de los republicanos tras intensas negociaciones y presiones políticas. Hakeem, retrasó la votación final con un extenso discurso de más de ocho horas, intentando sin éxito frenar la aprobación del proyecto.
En el Senado, la votación quedó en empate y fue el vicepresidente J.D. Vance quien desempató a favor de la medida. En la Cámara de Representantes, solo dos republicanos votaron en contra, evidenciando el sólido control que ejerce el mandatario sobre su partido.
Qué contiene la ley
El proyecto de ley contempla profundas transformaciones en la política económica del país:
- Extensión permanente de los recortes de impuestos de 2017, una de las mayores promesas de Trump desde su primer mandato.
- Eliminación de impuestos sobre propinas y horas extras, medida especialmente dirigida a trabajadores de servicios y sectores de bajos salarios.
- Incremento en el límite deducible de impuestos estatales y locales (SALT), beneficiando principalmente a contribuyentes de ingresos medios y altos en estados con alta carga fiscal.
- Reducciones drásticas en programas sociales, como Medicaid y el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP), popularmente conocido como cupones de alimentos. Los republicanos defienden estos recortes como necesarios para reducir el déficit.
- Reasignación de fondos para fortalecer la seguridad fronteriza, defensa y medidas de control migratorio.
Críticas y preocupaciones
El proyecto ha despertado fuertes críticas de la bancada demócrata, cuyos líderes han calificado la propuesta como un “atraco a los pobres y la clase media” y han advertido sobre el impacto negativo que tendrá en millones de estadounidenses que dependen de programas sociales para salud y alimentación.
«Nunca pensé que estaría en el pleno de la Cámara de Representantes diciendo que esto es una escena del crimen. Una escena del crimen, que ataca la salud, la seguridad y el bienestar del pueblo estadounidense», manifestó el líder del partido demócrata Hakeem Jeffries de Nueva York.
La Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO) advirtió que las medidas incluidas en la ley podrían incrementar el déficit fiscal entre 2,8 y 3,4 billones de dólares en la próxima década, debido a la combinación de menores ingresos tributarios y mayores gastos en áreas específicas como defensa y migración. Esto traerá consigo que 11.8 millones de personas no tendrán cobertura médica.
El presidente Trump celebró su victoria el jueves desde Iowa y agradeció a sus partidistas. «Quiero agradecer a los congresistas republicanos, porque lo que hicieron es increíble», dijo el mandatario mientras lanzó sus dardos contra el partido opositor afirmando que votaron en contra porque «odian a Trump, pero yo también los odio a ellos».
Impacto político
La firma del “One Big Beautiful Bill” se perfila como uno de los principales hitos legislativos del segundo mandato de Trump y es vista como pieza clave en la estrategia republicana de cara a las elecciones de mitad de mandato. Para el presidente, representa la consolidación de su visión económica basada en menores impuestos y un Estado federal más reducido, aunque los analistas advierten que también podría intensificar la polarización política y el debate sobre la desigualdad social.
Mientras tanto, la Casa Blanca se prepara para convertir la ceremonia de firma en un acto de celebración nacional, en un escenario cuidadosamente preparado para reforzar la imagen de Trump como líder decidido a cumplir sus promesas.
Los beneficios no alcanzarán a todos por igual puesto que la ley contempla reducciones drásticas en programas sociales como Medicaid —el seguro médico para personas de bajos ingresos— y el programa de asistencia alimentaria SNAP, conocido como cupones de alimentos. Estas reducciones podrían dejar sin cobertura médica o sin asistencia alimentaria a millones de personas, incluidas familias con niños, adultos mayores y trabajadores con empleos de bajos salarios.
Organizaciones defensoras de los derechos sociales han calificado la medida como “un atraco a los pobres y la clase media,” advirtiendo que el golpe a los programas sociales podría profundizar la desigualdad y aumentar la inseguridad alimentaria y sanitaria en el país.